LA BELLEZA VITAL

Vive en la forma de la eternidad, tratan de poseerla la inteligencia, la estética; construye el ámbito de la creación definitiva, mientras el firmamento se curva por el peso de las esferas, y mi huella queda en mi huella, y allí, como perfectos ciudadanos de la Naturaleza, como un fuego nuevo en la selva de las cosas....habremos recobrado la proyección sentimental, la dimensión temporal de las cosas,ella resplandor que deja en evidencia mi barbarie "humanizada"

He estado pintando unos cuadros tomando como referencia las obras de otros artistas.

2 comentarios:

Michelle dijo...: que lindo
los dos primeros son los que más me gustaron
saludos!; 07 noviembre, 2015
Jorge Abeel dijo...: Gracias por tu visita Michelle, y tu visión de estos cuadros, he pintado otros más voy a ver si los subo, siempre pintando mirando otras pinturas, pero no siguiendo las líneas exactamente ya que es muy difícil copiar, pero es como se debe aprender, para luego pintar cosas propias, aunque propio no hay nada todo es de este universo extraño.; 07 noviembre, 2015

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CIELO Y AGUA

Aquí en el reino de la apariencia pasajera y cambiante: de la indefinida sucesión de líneas y de tonos: donde todo relieve y toda figura, apenas dibujados se dan en sacrificio al movimiento innovador. La inquieta superficie bosqueja, hace miríadas de años, una forma que no llega a precisar jamás. Diríase la porfía indomable del artista que se abraza al material rebelde, y poseído de una norma interior, cien veces recomienza su obra y otras cien veces la deshace. Diríase también la manera cómo en la conciencia verdaderamente viva y dinámica, hierven, pasan y se sustituyen las ideas, sin petrificarse en inmutable convicción...

Vuelvo a mi mar y mis olas. Dulce empeño del tiempo es verlas nacer, morir y renovarse, y en la dejadez de un semisueño sentir que la inmensidad invade nuestra alma, y como que la penetra de su espíritu, y no sabe al cabo, si el objeto de la contemplación esta en lo infinito de las aguas o está en la profundidad del alma propia. Dulce es entonces asociar a cada ola un pensamiento, una memoria, una ficción y decirse: ésta, pujante y clamorosa, es la fe que me sostiene, la aspiración que me lleva adelante; aquéllas que blanquean allá lejos son los recuerdos de los que me quieren: esta otra, pequeñuela y exánime que prueba a ser y no es, y se disipa en un leve brinco de espuma, es la promesa que dejé cumplida, el sueño mío que murió de niño, el anhelo que no he de realizar jamás…

Veo unas claras pupilas de niño fijarse con dulce estupor, en una estrella que aparece. Rumor de voces, apagados ecos de música, remedan la palpitación lejana del mundo. Una mano arroja al viento del mar un montón de papeles rotos, que la ráfaga dispersa en sus vuelos y, a la manera de blancos alciones, se pierden en la inmensidad. José E. Rodó

LA CONCIENCIA IMPULSA A ESCRIBIR

Sólo soy un hombre y como tal, al expresarse, puede caer en mentirse a sí mismo.

Sólo cuando el hombre piensa, no puede ocultarse nada y sus sentimientos afloran a su mente como raudales de agua y entonces…en el secreto de su alma, la verdad le espanta. Ésa es su penitencia. Su cruz. Y para acallar su conciencia, se habla. Se habla a sí mismo pues la voz es una densa niebla que se extiende sobre la propia conciencia…ocultándola, aplastándola, ahogándola cada vez más hasta matarla.

Escribir es quizá pensar y para hacerlo hay que enfrentarse a la propia conciencia.

Cuando rememoro lo que he revelado, un hondo pesar se apodera de mí, ya que si hablo sería para defenderme, y si callo…aumento mi penitencia.

Cuando era niño un anciano me dijo:No te fíes del hombre que no reza! Y cuando mis manos se habían endurecido con el paso del tiempo, otro anciano me aconsejó:¡No te fíes del hombre que reza, pues en su oración hallará el perdón de sus crímenes!

Nunca he pretendido ser un santo, pero no deseo enfrentarme a mi conciencia, por ello denuncio en mis relatos todo cuanto aconteció, incluso acerca de mí mismo, ya que la severidad que empleo para conmigo me da derecho a ser justo y sincero en las críticas ajenas. (De J.Vicente Ortuño )

HUMANIDAD, COMO UNA MANIFESTACIÓN DE LA NATURALEZA

La “Suma” de su concepción del mundo y de la vida y de su religión, la podemos encontrar expresada en sus maravillosas palabras: Muy suavemente habla un dios en nuestro pecho, muy suave, pero muy claramente nos señala qué debemos intentar, y qué debemos evitar. Existe una virtud más grande que todas las demás: el anhelo constante hacia lo alto, la lucha consigo mismo, el afán insaciable de mayor pureza, sabiduría, bondad, amor. La filosofía de Goethe representa el tipo de pensamiento que pertenece al futuro...Siguió con profunda seriedad el camino que debía seguir de acuerdo con los impulsos de su carácter…Esfuérzate por acercarte al verdadero ideal humano. Sé tu mismo, sé una persona de vida interior siempre más intensa, que al mismo tiempo, y de la manera que mejor corresponde a su naturaleza, es una persona de acción…Tiene todavía algún sentido insistir en el ideal de una humanidad individual, cuando las circunstancias se oponen a él, o existirá en cambio la posibilidad de que nos adaptemos a un nuevo ideal humano, de acuerdo con el cual sea dado a la persona alcanza otro tipo de perfección mediante la total disolución dentro de la sociedad organizada? Esto último, sin embargo, significaría alejarse como Fausto, en espantosa confusión, de la naturaleza y abandonarse a lo antinatural. Después de todo, qué es lo que está ocurriendo en esta época nuestra terrible, sino una gigantesca repetición del drama de Fausto en el escenario del mundo? En un mar de llamas arde la cabaña de Filemón y Baucis. Con mil formas diversas de violencia, y con mil crímenes distintos, el sentimiento inhumano representa su delictuosa tragedia. Con mil muecas nos sonríe sardónicamente Mefistófeles. De mil maneras la humanidad ah permitido que se le impusiera una relación antinatural con la realidad, buscando una salvación en las fórmulas encantadas de una magia económica y social, que cada vez aleja más y más nuestras posibilidades de dominar algún día nuestra miseria económica y social. Y el sentido aterrador de estas fórmulas de encantamiento, sea cual sea la magia social y económica que las impone, es siempre éste: que el individuo renuncie a su independencia material y espiritual, y se resigne a existir únicamente como participante de una masa que tanto material como espiritualmente lo domina en todo sentido. ALBERT SCHWEITZER.

IMAGINACIÓN FANTÁSTICA

Somos juguete de nuestra imaginación fantástica y un simple movimiento de párpados puede hacer despertar en nosotros inmensas alas adormecidas. Si bien el hombre no se atreve a alzar la cabeza para mirar a la cara al demonio. La contemplación directa del misterio sería insoportable para los sentidos humanos. El alma sería presa de pánico y ya no osaría vivir. La Comedia, las palabras locas, riendo, nos devulven a la naturaleza gregaria del hombre y nos hacen olvidar lo inolvidable. El corazón humano se tranquiliza. Se ha estremecido durante un instante al inclinarse sobre el abismo, pero pronto se retira a la tierra firme, tierna, cubierta de hierba y de frutos. Y aprende a amar la vida con un amor desesperado, e inventa palabras muy tiernas para nombrar la tierra, el agua, el pan y a la mujer, y allí la disciplina es la virtud más alta, gracias a ella, la fuerza se equilibra con el deseo y así fructifica el esfuerzo penoso del hombre. N. Kazantzaki

LAS VALLAS DEL HOMBRE

Estas no pueden ordenarle a nuestra Esperanza y Voluntad...el día en que te halles en una situación angustiosa y tengas la impresión de que todo se conjura en contra tuya, de manera tal que te imagines no poder soportar ni siquiera un minuto más, no te des por vencido, porque es ese el instante preciso en que la marea ha de cambiar, la gloria reside en incorporarnos, aunque se oponga el mundo entero, son muchos los hombres que no conceden a sus principios tiempo suficiente para que arraiguen, es la paciencia el motor de la Naturaleza, siempre, siempre habrá de resarcirte el ingenio, jamás usaremos el adjetivo imposible "Impossible is nothing" teniendo presente en nuestro ser la Esperanza y la Voluntad, estamos destinados a deslizarnos sobre las tempestades desde nuestra mirada interior siempre...

EMANCIPARME.

De lo enclaustrado, limitante insular pintoresco ese fue mi impulso natural, que se transformó en ley escatológica de mí existir. Perdurar como la piedra enclavada en el quicio de la tierra en que se afirma, preferir el disiparse como el éter elemental en la universalidad. Huir de los límites hasta en el círculo de lo verbal, de lo idiomático; hasta sentir la insuficiencia de la expresión moderna de la poética. ¿Orgullo, Por qué, orgullo vanidad, eso? ¿Es orgullo el volar del ave o de la hoja? Cuando el poeta vive, se integra en el anonimato del cosmos. Nadie se esfuma se pierde se reduce a no ser, con más facilidad que el poeta. Nadie es más animalidad que él. Es un total naufragio. Pero de allí vuelve con sus tesoros inmensos. Se reconcentra y se recupera. Se aísla y vive. Se entrega a su yo y empieza a crear. Se queda solo frente a las ideas y se inmortaliza. E.Oribe