EL ESTADO DE NUESTRA IGNORANCIA

La literatura constituye una experiencia integral y especial de la vida, un modo de esclarecer la conducta y los sentimientos humanos. Uno de los placeres de la literatura, asienta en el prólogo, consiste “en tratar de comprender por qué sentimos de tal o cual manera, en comparar nuestras emociones con las que otros nos dicen experimentar, en descubrir nuevos confines de nuestros sentimientos.( Lionel Trilling)

No podemos esperar soluciones rápidas ni totales para los problemas de nuestro ambiente, cuando es tan poco lo que conocemos de los elementos que nos rodean, y de sus efectos sobre la mente y el cuerpo del hombre.
Los estadistas, planificadores sociales y técnicos afirman a menudo el obstáculo principal para combatir la contaminación del aire es su elevado costo. Pero, a decir verdad, aun cuando tuviéramos a nuestra disposición recursos ilimitados, no podríamos formular programas de control verdaderamente eficaces. Ya en el Critias de Platón sabemos claramente que su autor comprendía que la deforestación y el excesivo apacentamiento de animales podían causar la erosión del suelo y secar las fuentes. Al parecer, nadie escuchó sus advertencias.
Todo parece predecir que el hombre, que fue el último en llegar a la tierra, será el primero en abandonarla (Maurice Maeterlinck)
La carrera por la supervivencia lleva a:
Destrucción de las Riquezas
La erosión de los suelos
Avance de la contaminación
El problema de la Radiactividad
Los desperdicios del hombre
El desequilibrio del oxígeno y las fuentes de agua
(Todas estas circunstancias traen consecuencias inesperadas, y solo para citar un ejemplo de las conocidas, citemos las mal formaciones, yo me pregunto, el cerebro humano está realmente sano, no tendrá una mal formación global)

Algún día el mundo acabará en fuego
Dicen otros que en hielo
Por lo que del deseo he catado
Me uno a los que al fuego favorecen
Pero si debiera dos veces el mundo perecer
Creo conocer bastante al odio
Para poder decir
Que, para destruir
Por lo mucho que puede, el hielo
Para esta labor bastaría- (Robert Frost)

Este maravilloso mundo que habitamos es más maravilloso de lo que conviene, más hermoso que útil, más bien debe ser admirado que utilizado- ¿De qué sirve una casa si no se tiene un planeta presentable donde ponerla? (Henry D. Thoreau)

Todas las cosas por un poder inmortal, cercano o lejano, ocultamente, una a la otra, tan unidas están que es imposible tocar una flor, sin que se estremezca una estrella (Francis Thompson)

El hombre primitivo cuando inventó el fuego, debió agregar y también acabo de inventar la polución-
Ya en 1966 el naturalista Marston Bates escribió: la ecología bien puede ser la más importante de las ciencias, en relación con la subsistencia humana a largo plazo, pero se encuentra entre las menos comprendidas por el público en general…hoy en día estamos en el mismo punto.
Existe una paradoja en el seno mismo de la indispensable “lucha por la existencia” que sencillamente consiste en lo siguiente: Ni el hombre ni ningún otro animal puede triunfar en forma excesiva en tal lucha. La rendición incondicional es una fórmula que se derrota a sí misma, aun en la guerra contra las plagas de insectos. Al ganador le corresponde el botín pero sólo por un tiempo. Cuando ya no hay botín que arrasar, el vencedor perece. (Joseph Wood Krutch) Concluyo que todo desarrollo es limitado.

UNA CARRERA ENTRE LA EDUCACIÓN Y LA CATÁSTROFE-
La falacia de los sistemas: desde el siglo XVII hemos estado viviendo en una época de formulaciones de sistemas y lo que es aún peor, aplicadores de sistemas, los radicales mutiladores de la vida que suprimen sus esenciales irregularidades para amoldarla a un solo juego de principios coherentes y fines ideales. Pero la vida no puede reducirse a un sistema: la mejor sabiduría, cuando se la reduce a un juego de notas insistentes, se convierte en una cacofonía: de hecho, cuanto más tercamente se ciñe uno a un sistema, mayor violencia comete contra la vida. Estos provocadores de sistemas, tratan de alinear a toda la comunidad de acuerdo con algunos principios limitadores, a la que debería oponérsele la “filosofía de la síntesis abierta”
Entre los muchos sistemas, incluyendo al capitalismo y al comunismo marxista, también incluyendo al utilitarismo, con sus crasas nociones mecanicistas de “eficiencia”. Aunque los crímenes sociales cometidos por la civilización industrial en nombre de la utilidad y la eficiencia ya debieran habernos puesto en guardia contra toda simplista y mecánica “idea de progreso”, el utilitarismo del siglo, se encuentra sano y salvo, bajo el disfraz de la tecnocracia y el cientismo. Ese apasionamiento centrado en el poder, por la técnica, como una verdadera locura, no es que la pura ciencia ficción, no sean irrealizables, por el contrario, es que son demasiado factibles en una época de capacidad técnica sin paralelo, que a menudo supera el control humano, serían una profunda armonía con las tendencias negativas de nuestros tiempos.
El impacto de la ciencia sobre la tecnología en los dos últimos siglos ha causado una transformación radical de todo el medio humano, esta transformación que ha equipado al hombre con tantas maravillosas extensiones mecánicas, también transforma psíquicamente al hombre. La computadora, en sí no es más dañina que el ábaco, el valor de la máquina depende del uso que de ella hace el hombre. (Lewis Mumford)

Me parece inconcebible que una relación ética con la tierra pueda existir sin amor, respeto y admiración por la tierra, así como sin una alta estima de su valor. Al decir valor, naturalmente, me refiero a algo más amplio que el valor meramente económico. Me refiero al valor en el sentido filosófico. ( Aldo Leopold).

Juro que no existe ni grandeza ni poder, que a los de la tierra no emule. No puede haber teoría que alguna importancia tenga que no corrobore la teoría de la tierra. Ni política ni canción ni religión ni conducta ni nada de lo demás merece consideración si compararse no puede con la amplitud de la tierra, si no mira de frente la exactitud, vitalidad, imparcialidad y rectitud de la Tierra. (Walt Whitman)

Lo más notable acerca de la conservación de los recursos naturales, es que nunca es permanente. Un bosque de valor incalculable o una montaña de características únicas que son salvados, el día de mañana se verán amenazados en otro frente. El hombre, el más ingenioso de los ANIMALES DEPREDADORES, algunas veces parece decidido a destruir los tesoros de su propio medio ambiente. (Hal Borland)

Un dinosaurio le decía a su cría: mira, hijo, estamos conscientes de los problemas de nuestra sociedad; estamos trabajando en ellos.

Un mundo del que ha sido extirpada la soledad constituye un ideal muy pobre (John Stuart Mill)

En tal estado de una sociedad (el estado de anarquía democrática) el maestro teme y adula a sus alumnos, y los alumnos desprecian a sus maestros y tutores; jóvenes y viejos son similares; el hombre joven está en el mismo nivel del viejo, y está dispuesto a competir con él en palabra y obra; y los viejos condescienden con los jóvenes y se muestran llenos de amabilidad y alegría; detestan ser considerados morosos y autoritarios, y por lo tanto adoptan las maneras de los jóvenes. (Platón) Hoy en día esto se manifiesta de una forma hasta desagradable a mi juicio.
* Esto es un resumen que hice luego de leer una edición de 1970 “FACETAS” que encontré, no tengo idea si continúan con sus ediciones.